miércoles, mayo 31, 2006

Discurso ante la tumba de Marx de F. ENGELS

Discurso pronunciado por F. Engels en el cementerio de Highgate, el 17 de marzo de 1883. Karl Marx había muerto 3 días antes, el 14 de Marzo de 1883.




El 14 de marzo, a las tres menos cuarto de la tarde , dejó de pensar el más grande pensador de nuestros días. Apenas le dejamos dos minutos solo, y cuando volvimos, le encontramos dormido suavemente en su sillón, pero para siempre.

Es de todo punto imposible calcular lo que el proletariado militante de Europa y América y la ciencia histórica han perdido con este hombre. Harto pronto se dejará sentir el vacío que ha abierto la muerte de esta figura gigantesca.

Así como Darwin descubrió la ley del desarrollo de la naturaleza orgánica, Marx descubrió la ley del desarrollo de la historia humana: el hecho, tan sencillo, pero oculto bajo la maleza ideológica, de que el hombre necesita, en primer lugar, comer, beber, tener un techo y vestirse antes de poder hacer política, ciencia, arte, religión, etc.; que, por tanto, la producción de los medios de vida inmediatos, materiales, y por consiguiente, la correspondiente fase económica de desarrollo de un pueblo o una época es la base a partir de la cual se han desarrollado las instituciones políticas, las concepciones jurídicas, las ideas artísticas e incluso las ideas religiosas de los hombres y con arreglo a la cual deben, por tanto, explicarse, y no al revés, como hasta entonces se había venido haciendo. Pero no es esto sólo. Marx descubrió también la ley específica que mueve el actual modo de producción capitalista y la sociedad burguesa creada por él . El descubrimiento de la plusvalía iluminó de pronto estos problemas, mientras que todas las investigaciones anteriores, tanto las de los economistas burgueses como las de los críticos socialistas, habían vagado en las tinieblas.

Dos descubrimientos como éstos debían bastar para una vida. Quien tenga la suerte de hacer tan sólo un descubrimiento así, ya puede considerarse feliz. Pero no hubo un sólo campo que Marx no sometiese a investigación -y éstos campos fueron muchos, y no se limitó a tocar de pasada ni uno sólo- incluyendo las matemáticas, en la que no hiciese descubrimientos originales. Tal era el hombre de ciencia. Pero esto no era, ni con mucho, la mitad del hombre. Para Marx, la ciencia era una fuerza histórica motriz, una fuerza revolucionaria. Por puro que fuese el gozo que pudiera depararle un nuevo descubrimiento hecho en cualquier ciencia teórica y cuya aplicación práctica tal vez no podía preverse en modo alguno, era muy otro el goce que experimentaba cuando se trataba de un descubrimiento que ejercía inmediatamente una influencia revolucionaria en la industria y en el desarrollo histórico en general. Por eso seguía al detalle la marcha de los descubrimientos realizados en el campo de la electricidad, hasta los de Marcel Deprez en los últimos tiempos.

Pues Marx era, ante todo, un revolucionario. Cooperar, de este o del otro modo, al derrocamiento de la sociedad capitalista y de las instituciones políticas creadas por ella, contribuir a la emancipación del proletariado moderno, a quién él había infundido por primera vez la conciencia de su propia situación y de sus necesidades, la conciencia de las condiciones de su emancipación: tal era la verdadera misión de su vida. La lucha era su elemento. Y luchó con una pasión, una tenacidad y un éxito como pocos. Primera Gaceta del Rin, 1842; Vorwärts
* de París, 1844; Gaceta Alemana de Bruselas, 1847; Nueva Gaceta del Rin, 1848-1849; New York Tribune, 1852 a 1861, a todo lo cual hay que añadir un montón de folletos de lucha, y el trabajo en las organizaciones de París, Bruselas y Londres, hasta que, por último, nació como remate de todo, la gran Asociación Internacional de Trabajadores, que era, en verdad, una obra de la que su autor podía estar orgulloso, aunque no hubiera creado ninguna otra cosa.

Por eso, Marx era el hombre más odiado y más calumniado de su tiempo. Los gobiernos, lo mismo los absolutistas que los republicanos, le expulsaban. Los burgueses, lo mismo los conservadores que los ultra-demócratas, competían a lanzar difamaciones contra él. Marx apartaba todo esto a un lado como si fueran telas de araña, no hacía caso de ello; sólo contestaba cuando la necesidad imperiosa lo exigía. Y ha muerto venerado, querido, llorado por millones de obreros de la causa revolucionaria, como él, diseminados por toda Europa y América, desde la minas de Siberia hasta California. Y puedo atreverme a decir que si pudo tener muchos adversarios, apenas tuvo un solo enemigo personal. Su nombre vivirá a través de los siglos, y con él su obra.


F. Engels

viernes, mayo 26, 2006

Noticias locas (o cuando la realidad supera a la ficción)

Viernes 26 de Mayo de 2006, estás son algunas de las noticias más importantes del día para Ernestina Herrera de Noble:



18:00 Mataron en Irak a dos tenistas y al entrenador del equipo nacional: sospechan que fue por usar pantalones cortos

Fueron ejecutados cuando se dirigían a una lavandería de Bagdad. Hace unos días, un grupo sunnita había exigido evitar el uso de ese tipo de prendas.


15:21 Mide 8 kilómetros y es, posiblemente, el ser vivo más grande del mundo

Es una macro-planta submarina con diversas extensiones que provienen de la misma semilla. Se encontró en Formentera y tiene más de 100.000 años de edad.


13:15 Un diputado británico afirma que el asesinato de Blair estaría "moralmente justificado"

El polémico George Galloway, laborista disidente y fundador del partido Respeto, señaló que quienes lanzaron “una guerra ilegal y asesina” contra Irak, no pueden quejarse si alguien trata de “devolverles el golpe”.



Es joda esto ?? Qué nos pasa a los argentinos ? estamos locos ... hoy ajustician a uno por usar pantalones cortos y mañana matan a Blair y es noticia ?? eso es noticia ??



El gran diario argentino

lunes, mayo 22, 2006

Contra quién vamos a jugar ??

Europa 22.05.2006
Nace un nuevo país: Montenegro


La comisión electoral confirmó que los soberanistas obtuvieron el 55,4% de los votos en el referéndum de ayer. Así superaron el umbral del 55% impuesto por la UE, que ya dijo que respetará el resultado.

Entonces, los montenegrinos han decidido que no quieren seguir formando un Estado con Serbia. Nace la República de Montenegro y los últimos vestigios de la unión de los eslavos del sur, Yugoslavia, se desmoronan.


Fuente: YugoslaviaCaput Times


La pregunta sería: con quién poronga jugaremos el 16 JUN 06 en GELSENKIRCHEN?? contra Serbia ?? contra Montenegro ?? contra ambos ?? contra ninguno ??

Comienza el debate que traerá largas polémicas. El país que logro la clasificación es Serbia y (= intersección) Montenegro, posiblemente separadas no lo hubieran logrado (sobre todo teniendo en cuenta que juntas a duras penas tienen un par de jugadores buenos). El tema es que se tiene que respectar esa condición sin la cual no estarían en el grupo C del mundial.

Siendo un mismo país, la conformación del equipo no traería ningún tipo de problemas, pero ahora que son 2 paises distintos ... aceptará Montenegro no contar con ningún titular ?? o con muy pocos. JAMÁS !! se tiene que hacer justicia, por la patria montenegrina.

Lo razonable, según mi humilde punto de vista, es que se arme un combinado entre jugadores nacidos en cada ispa, y que se respeten proporciones de población: si Serbia tiene el doble que Montenegro entonces deberá tener el doble de jugadores titulares. Discriminación positiva que le llaman, así se respeta a la minorías inferiores como los negros y las mujeres. El técnico debe ser un natural de otros lares, un neutral que no tenga nada que ver, por ejemplo un burkinafaseño.

Veremos como se resuelve esto ... Por lo pronto dejo otra pregunta: hasta cuando tendrán que tolerar los monteños (una nación independiente con todas las letras) seguir unidos con los negros ??


Franz Khanieni

martes, mayo 16, 2006

Prisma opina de la FUBA

El discurso de PRISMA en el congreso de la FUBA del pasado sábado. La oradora fue Eugenia, digo Guada:





En primer lugar, saludamos la celebración del Congreso, que abre lapuerta a una normalización de la FUBA, sumamente necesaria para unafederación que pretende representar al conjunto de los estudiantes; más aúnen la actual coyuntura, en la que nuestra Universidad se ve amenazada por elretorno de la Franja Morada de la mano de Alterini y por la profundizaciónde las políticas educativas neoliberales.
Sin embargo, no podemos dejar de repudiar la falta de renovación deautoridades de este último período. Vemos con estupor que prácticaspolíticas que todos repudiamos a nivel nacional sean imitadas en esteespacio, donde se compran y venden cargos a cambio de quorum o votos.
Así también vemos que la transformación, que todos creíamos sobrevendríaa la necesaria expulsión de la Franja Morada de la conducción de la FUBA, nose ha realizado. Creemos en una Federación de cara a los estudiantes y llenade contenido, que no sea sólo una expendedora de fotocopias y -en esta nuevaetapa- de consignas. Queremos que la Federación sea un ámbito demovilización y debate, que potencie las iniciativas y proyectos de losestudiantes, que tenga incidencia en la política universitaria generando loscambios que sean necesarios... Pero, por sobre todo, que nos permitaenfrentar las políticas de ajuste y ahogo presupuestario, y lamercantilización de la educación; y que sea capaz de articular con lasociedad aportando a la necesaria y urgente transformación social.


DEMOCRATICEMOS LA FUBA

TRANSFORMEMOS LA UNIVERSIDAD
REVOLUCIONEMOS LA SOCIEDAD

sábado, mayo 13, 2006

Por fin llegó lo que estabas esperando !




Sí Sï, claro que sí. Se viene lo que estabas esperando !! esta semana sale la Sin Güeso, número 2. Con todas las notas que venís leyendo aca y un mucho más.

miércoles, mayo 10, 2006

Alienación Ideológica

Una nota que escribió una amiga mia: Ligeia. Se suponía que iba a ir en la Sin gueso, pero tu sabes ...


Alienación Ideológica


Antes que nada, es necesario aclarar hacia donde de dirigirá este texto y el motivo que lo impulsa. Lo primero a tener en cuenta, es que dicho contenido se propone desviar de la lógica del agotado -por lo menos desde el punto de vista discursivo- modelo neoliberal.

En tal sentido, nos hallamos frente a lo que Fidel Castro denomina “la batalla de las ideas”. Para empezar a recorrer este camino, es importante que el pueblo conozca los problemas y los desafíos a los que se enfrenta, pues de esta manera se podrán combatir los obstáculos del actual sistema capitalista y contribuir a una verdadera transformación. Es preciso fomentar el debate de ideas y concientizarse acerca de la importancia de nuestra participación en el ámbito de la política, pues de aquí derivan los actuales problemas económicos y sociales.

Pero... ¿Cómo se consigue dejar de pensar como la clase dominante? Dicho interrogante constituye el punto conflictivo de éste artículo, que aunque no tiene la más mínima intención de proporcionar una solución acabada respecto del tema, sí pretende abrir un espacio para la auto-reflexión y la auto-crítica de los más diversos pensamientos.

Si no asumimos que nuestra humanidad está en riesgo y si olvidamos que no somos más que el producto de construcciones ideológicas anteriores, no podremos reformar la concepción del mundo y propiciar el cambio. En palabras de Marx, “La tradición de todas las generaciones muertas oprime como una pesadilla el cerebro de los vivos” (1)

En consecuencia, al investigar acerca de los obstáculos que dificultan la unión de los distintos movimientos de resistencia, vemos que el sectarismo es uno de los más significativos, a la hora de impedir a las agrupaciones de izquierda la cooperación colectiva necesaria para la conformación de un bloque hegemónico que desestabilice a la derecha imperante. Siguiendo a Gramsci, “El sectarismo es apoliticismo, es una forma de clientela personal” (2) Las críticas de un grupo a otro, no hace más que producir un desgaste del propio proyecto, lo que termina favoreciendo la inviabilidad de las propias propuestas.

Por consiguiente, es ineludible dejar atrás el dogmatismo para crear una nueva coalición. Como diría Gramsci, “Sin la ruptura de la ideología tradicional, la fuerza nueva no podrá adquirir conciencia de la propia personalidad independiente. Por ello, al no haber ruptura, los grupos dirigentes conservadores han mejorado su técnica política tradicional.” Es la carencia de autocrítica lo que no permite que no sean superados los errores del pasado, y lo que refuerza la hegemonía neoliberal.

La formulación de un análisis constructivo que conlleve a la apertura de nuevos senderos, ocurre a través de la exploración de las propias limitaciones, aunque sin descuidar las contradicciones del capitalismo actuales, capaces de generar nuevas fisuras en el modelo consagrado.


(1) Karl marx, “Les dix huit brumaire de Louis Bonaparte”(2) Antonio Gramsci, “Notas sobre Maquiavelo, sobre la política y el Estado moderno”


Ligeia

sábado, mayo 06, 2006

Comentario sobre la Teoría del Caos


Un comentario epistemológico que es una poronga. Sobre la Teoría del Caos, otra de las grandes mentiras de la ciencia.



Desde la perspectiva de la Teoría del Caos o de la Complejidad, la causalidad surge y se diluye en redes de interacciones no lineales, donde se conecta lo nuevo con lo viejo y de la cual surgen nuevos órdenes de complejidad. En esta nueva etapa de visión holistica del mundo no tiene cabida el pensamiento lineal y estructuralista.

Ahora bien, esta teoría que se basa en una dialéctica entre el orden y el desorden desde la cual “emerge” una nueva estructura autoorganizante tiene origen en las ciencias duras (la física quántica), sin embargo utiliza el pensamiento dialéctico, una herramienta importante de las ciencias sociales. Aquí se plantea una cuestión epistemológica sobre las ciencias duras en relación con las sociales.

El Marxismo, máxima expresión de las ciencias sociales, considera que los seres humanos se desarrollan como parte del mundo natural. La ciencia natural por sí sola no puede explicar el funcionamiento de las sociedades. Pero cualquier tentativa de entender la sociedad humana que no esté firmemente puesta a tierra por una comprensión científica de la naturaleza, está condenada a fracasar.

Sin embargo en este caso el camino fue el inverso al del Materialismo Dialéctico: desde herramientas de las ciencias sociales se resuelven problemas de las ciencias duras.

Franz Khanieni




“La libertad no consiste en el sueño de la independencia de las leyes naturales, sino en el conocimiento de estas leyes y en la posibilidad que nos da para llevarlas sistemáticamente hacia fines definidos”. F. Engels

miércoles, mayo 03, 2006

La UBA hoy

Esta es una artículo de Axel Kichilof, un profe de la UBA de cs. políticas y cs. economicas. Formaba parte de la agrupación independiente TNT de económicas, que fue gestión de FUBA hace unos años asique sabe bastante cómo viene la mano. Es un poco largo pero vale la pena leerlo.





Universidad de Buenos Aires: ¿Qué hacer?

Las causas de la furiosa crisis política desatada en la UBA por la elección de rector no se agotan en los oscuros antecedentes del candidato que, por el momento, ha juntado una presunta mayoría de votos. Tampoco, como sostienen algunos, en los supuestos "excesos" de una turba estudiantil vista como descontrolada e, incluso, como "antidemocrática". Ninguno de estos argumentos, ni mucho menos su combinación bajo la falaz síntesis de "los dos demonios" sirven para explicar la crisis actual, cuyas causas son, lamentablemente, más profundas y de más largo aliento. Causas cuya envergadura supera, con mucho, el ámbito universitario.

La Universidad no fue ajena a los avatares que atravesó la sociedad argentina durante los últimos treinta años de sistemática desindustrialización productiva y de creciente pauperización del grueso de los trabajadores; por el contrario, su actual semblante es un fiel reflejo de ese proceso. Así como no es en modo alguno casual que la añorada "edad de oro" de la universidad haya coincidido con una etapa de fuerte crecimiento de la industria en el país, tampoco lo es que la larga y agónica decadencia en que está actualmente sumida se produzca en un marco de retroceso y estancamiento.

A mediados de la década del setenta, la trayectoria de crecimiento económico se interrumpe y se abre una etapa de devastación social. En los sesenta, la universidad se había distinguido por la producción de científicos y profesionales, pero también por ser una usina de pensamiento crítico. De su seno salió buena parte de los jóvenes que se propusieron transformar a la Argentina de raíz. Pero luego las nuevas condiciones económicas ya no requerían más ciencia para alimentarse. Tampoco había lugar para las profesiones liberales: el médico con consultorio propio, el contador, el abogado, el arquitecto independiente, eran reemplazados por grandes empresas con empleados asalariados y sueldos miserables. Y el pensamiento crítico se convertía en el peor enemigo del sistema político que dirigía estas transformaciones.

Sin embargo, las puertas de la Universidad no fueron cerradas abruptamente. Las nuevas condiciones se fueron imponiendo de una forma casi imperceptible, solapada, pero sistemática. En un marco de ajuste fiscal permanente, la UBA fue sometida a la lenta tortura del ahogo por estrangulamiento presupuestario. La aritmética es simple y perversa: hoy, con casi 400.000 estudiantes, su presupuesto no pasa de los 350 millones, es decir, menos de 1000 pesos anuales por alumno. El 95% de ese presupuesto se destina a pagar a los sueldos de sus 30.000 docentes, lo que significa menos de 700 pesos mensuales por docente. La investigación, por su parte, está directamente condenada a muerte. El interrogante no es, entonces, por qué la UBA atraviesa serias dificultades, sino, lisa y llanamente, cómo hace para seguir funcionando. Con todo, esta explicación contribuye a la comprensión del marco general de los acontecimientos, pero no aun de la particular naturaleza de los actuales enfrentamientos.

La UBA sobrevivió a estos 30 años de ahogo, recientemente agravado por la inflación posterior a la devaluación. Y sobrevivió de manera darwiniana; adaptándose a su nuevo medio. Los recursos públicos no llegaban, así que al principio tímidamente, y luego con salvajismo, la Universidad salió a la caza (y a la pesca) de todo tipo de recurso, proveniente de todas las fuentes imaginables. Y el irónico eufemismo no se hizo esperar: a esta virtual privatización se la llamó "modernización". Los negocios académicos o directamente privados se colaron por cada pliegue, penetrando en cada poro del funcionamiento de la universidad. Algunas Facultades, claro está, tenían más artículos para vender que otras. La Facultad de Ciencias Económicas, por caso, abrió una agencia de empleo ofreciendo "a la venta" a sus 60 mil estudiantes para trabajar en negro en empresas o en el Estado a cambio de una comisión para la UBA (bajo el nombre de "pasantías"). Otras se convirtieron en consultoras de todo pelaje, o vendían cursos de idiomas, o alquilaban inmuebles e instalaciones deportivas. Incluso se vendieron espacios públicos y aulas para que los privados pongan publicidad. Aun más; cada vez con mayor fuerza fue instalándose también el arancel directo, a través del cobro de bochazos, ausentes, títulos y trámites varios. Más adelante apareció el negocio de los posgrados arancelados (el Estatuto no decía "literalmente" que debían ser gratuitos), los que empezaron a proliferar con febril algarabía. Como no había, definitivamente, fondos para investigación, cada investigador debió salir a ofrecer sus "productos" al mejor postor, sea nacional o extranjero, público o privado. A esta altura, el viejo principio de gratuidad había pasado a la historia, llevándose consigo a su compañera, la autonomía. Una universidad condenada a mendigar recursos externos no tiene, no puede tener, libertad de investigación. No es autónoma porque sus líneas "dependen" del financiamiento externo, condicional y condicionante.

La consolidación de las famosas "camarillas" responde a este movimiento de mercantilización. La generación de "recursos propios" cada vez más cuantiosos –no sujetos a reglamentación estatutaria – dio lugar a todo tipo de componendas, prebendas, acuerdos, cuando no a grupos con accionar cuasi-mafioso que se disputan las cajas (la Facultad de Económicas llegó a tener una facturación que triplicaba los fondos públicos). Y a la vez, produjo una profunda fragmentación entre los docentes: por un lado, los recursos "limpios" y genuinos son mínimos, y sólo alcanzan para un grupo pequeño que estableció los mecanismos "legales" para su reproducción; por otro lado, los recursos "negros" se distribuyen "a dedo", según criterios puramente "políticos". Mientras tanto, la gran masa de los docentes dicta sus cursos gratuitamente o cobrando salarios de hambre. A modo de ilustración, basta recordar que el sueldo docente más alto en la universidad no llega a los 2.500 pesos, una suma menor a la de cualquier obrero industrial calificado. Esta estructura de castas tiene, además, su correlato en el sistema electoral. El Estatuto de la UBA le da voto a los docentes concursados; cuando ese Estatuto se aprobó, en los sesenta, la mayoría lo eran, pero hoy sólo un porcentaje mínimo puede votar. En la Universidad rige el voto calificado. Así, en los hechos, tampoco está vigente el espíritu del cogobierno.

El menemismo generó al interior de la universidad su contrapartida, el llamado "shuberofismo". En aquella época, la oposición al gobierno permitía abroquelar políticamente a los profesores y estudiantes para defenderse de los ataques externos. Mientras tanto, se afinaba y extendía la privatización encubierta de la UBA. Bajo el rectorado de Shuberoff se multiplicaron los negocios privados, los "quioscos" y los "convenios" de toda índole. Por su parte, los centros de estudiante controlados por Franja Morada se convirtieron también en "empresas de servicios" con facturaciones millonarias. Se intentó incluso acortar todas las carreras y, para captar más fondos, se abrió la puerta a los organismos multilaterales de crédito. Con el estallido del gobierno de la Alianza en 2001, el radicalismo en retirada debió ocultarse, y esto incluyó también al espacio de la Universidad. Pero que quede claro: las camarillas siguen vivas. En el gobierno de Etcheverry, el rectorado perdió su hegemonía sobre los negocios de las Facultades, fue impotente para desarticularlos e incluso para denunciarlos; pero éstos siguieron y siguen viento en popa.

La encrucijada actual parece ser la siguiente: por un lado, las viejas alianzas del shuberofismo lograron, hasta cierto punto, recomponerse, en particular en las Facultades más mercantilizadas y profesionalistas. Por otro lado, en otras Facultades, la ecuación comenzó a modificarse, impulsada principalmente por la renovación del claustro de estudiantes. La confrontación toma hoy formas tan violentas porque el proyecto de recomponer la vieja sociedad de negocios necesita, para imponerse nuevamente, aplastar al movimiento estudiantil y docente organizado, acallando a toda la oposición. Del otro lado, el proyecto de "desprivatizar" y democratizar la UBA para devolverle su carácter público, gratuito, cogobernado y crítico, no se resuelve, a esta altura, con pequeños retoques de maquillaje. Esta crisis es entonces síntoma de una necesidad, presentida desde hace años, y ostensible hoy: la transformación de la UBA requiere un cambio de raíz. No olvidemos que en 1918, para reformar los estatutos y disolver las camarillas, hizo falta tomar la asamblea universitaria y arrojar a su rector por la ventana. Esa reforma fue, en rigor de verdad, una revolución en la Universidad.


Axel Kicillof
Profesor Regular
Investigador Titular